Hoy es jueves, y ayer fue miércoles: otro miércoles de internet, radio y flamenco.
Después de la mala leche que gasté en la entrada de Erudición flamencológica, gracias a varios profesionales de la radio y del flamenco, me reconcilié con la familia flamenca: mientras haya vida, hay esperanza.
A las ocho de la tarde me puse a escuchar por enésima vez el programa de Los Caminos del Cante (Onda Jerez) en internet, en dónde José María Castaño recoge parte de la charla que tuvo lugar en el Campus de Jerez, dentro del ciclo Presencias Flamencas, entre Manuel Curao (Canal Sur Radio) y el guitarrista jerezano Gerardo Nuñez.
Os recomiendo que no os lo perdáis. La semblanza que Manuel Curao hace del joven maestro da vértigo y abruma; pero cuando Gerardo Núñez empieza su relato, aquello parece una obra del Siglo de Oro: la narración de un pícaro, de un muchacho jerezano despejado y con ingenio para abrirse camino en su vocación guitarrística, en medio de impedimentos, zancadillas y lucha por la supervivencia. Sorprende que nuestro guitarrista flamenco más moderno, más creativo y generoso, haya pasado tantas penalidades.
Pero lo cuenta con gracia, y si no, echadle un oído a la historia del «gallego» y la ducha, y a sus otras historias. Y por favor, que alguien me «traduzca» el chiste del tocaor jerezano que se paseó por toda Europa con una camiseta que ponía… no logro entender a Gerardo cuando dice el contenido del letrero.
http://www.loscaminosdelcante.com/programa-gerardo-nunez-universidad-i/
Después, a las 21 horas y en directo en internet, más Caminos del Cante: un programa dedicado a la Paquera de Jerez. «¡Ay Paquera! ¡Cuánto te quiero!»
Pues bien, aunque estos dos programas hayan estado dedicados a artistas de Jerez, José María Castaño, profesional detrás de Los Caminos del Cante, no adolece, como otros muchos profesionales y artistas flamencos, de localismo y de esas «orejeras» tan impasibles que otros portan y que no les dejan ver nada fuera de su campo de visión pueblerino. Se ve que ama y cuida al flamenco jerezano, pero es universal a la hora de reivindicar todo el flamenco en su programa de radio. Le sigo desde que escribía en la edición de Jerez del ABC, y veo que va camino de convertirse en el referente flamenco de los medios de comunicación del siglo XXI.
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Termino de escuchar Los Caminos del Cante y me voy a cenar. Y después a la cama, a escuchar en la radio, Radio Círculo en la FM (100.4), el programa de Alejandro Escribano, Círculo Flamenco, que le hace una estupenda entrevista a Blanca del Rey.
Este programa, que originalmente realizaban Faustino Núñez y Alejandro Escribano, ha quedado al cuidado de éste último, tras la emigración del gallego Faustino a su nueva patria de adopción: Cádiz. Alejandro, aunque sin la erudición de Faustino, hace un programa muy digno, muy interesante y, de vez en cuando, con sorpresas muy reconfortantes. La juventud y la falta de erudición no le estorban en absoluto: todo lo contrario. Es humilde, se prepara a fondo los programas y sobretodo, conserva todavía el entusiasmo que otros -véase la entrada de ayer- tienen oxidado.
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«And now, the last but not the least» y a las 12 de la noche, en Radio Clásica, el programa de José María Velázquez-Gaztelu, Nuestro Flamenco: sus 20 o 25 minutos de guitarra flamenca muy bien seleccionada, y una entrevista con… Eva Yerbabuena (!!!)
Si Castaño va camino de convertirse en el referente del flamenco mediático del siglo XXI, Velázquez-Gaztelu lo es, indiscutiblemente, del siglo pasado y de todos los tiempos. Su participación en la realización de la serie de televisión Rito y Geografía del Cante (1971-73) lo ha colocado, muy alto, en los anales de la historia del flamenco.
Pero hoy quiero hablar de esa labor más invisible, y para mi más admirable, que realiza al frente del programa de Radio Clásica: Nuestro Flamenco. En noviembre de 2009 van a cumplirse los 25 años del programa que lleva realizando, en solitario, desde 1984 y creo que hay que montar una gran fiesta de agradecimiento.
No sé cómo andará su entusiasmo, después de 25 años de hacer flamenco en la radio, pero lo admirable es el sacrificio y el que nunca haya decrecido la calidad de sus selecciones, juicios y recomendaciones. Es un buen poeta, que como decía Pedro Turbica «escribe poca poesía». Escribirá poca poesía, digo yo, pero nos la comunica cada semana, desde hace 25 años, en Radio Clásica.
Salud, La Triniá
La otra noche -miércoles 3 de febrero-, Alejandro Escribano, en su programa Círculo Flamenco (Círculo de Bellas Artes) me dió la alegría de la semana: recuperó un fragmento del disco más buscado por mí y por todos los fanáticos del vinilo, del rock y del flamenco, conjugados.
Barrio de la Triniá 